Los interiores del edificio están cubiertos por vinilos que facilitan su desinfección. La obra pública más importante del país continúa sin freno.
Sin detener su marcha, la construcción del futuro Hospital Central “Ramón Carrillo” continúa implementando tecnología de vanguardia en su ejecución. Además de contar con un diseño sustentable, los materiales que se utilizan permiten optimizar no solo los tiempos de ejecución, sino que también cuentan con características que los hacen más eficientes que los convencionales. Uno de los ejemplos es el revestimiento vinílico en los laboratorios y los sectores de hemodiálisis, y gastroenterología. Esta solución estará presente en todas las zonas de media y alta complejidad del futuro nosocomio.
“Este material al no ser poroso y por su colocación continua, genera superficies más fáciles para desinfectar y mantener los espacios libres de bacterias. Además, otorga una imagen de diseño moderno y con propiedades electroestáticas, garantizando mayor seguridad a las áreas sensibles en cuanto a procedimientos quirúrgicos”, explicó en detalle el jefe del Programa de Grandes Obras de Arquitectura, Cristian Rasmussen y agregó que la obra que ejecuta el Gobierno provincial a través del Ministerio de Obras Públicas e Infraestructura, nunca se detuvo y siempre se trabajó bajos estrictas normas y protocolos de seguridad e higiene.
En cifras
La obra se ejecuta en un predio de 36 hectáreas, con más de 50.000 metros cuadrados cubiertos; contará con 400 camas, 16 quirófanos e instalaciones necesarias para más de 50 prestaciones. Además, se construyeron las residencias médicas en edificio de dos plantas, integrado por 40 departamentos de 1 y 2 dormitorios con gimnasio, parque, estacionamientos y quincho. El futuro hospital será el primero en atención digital del país, ya que dispondrá de la última tecnología, wifi de alta velocidad y variados servicios que funcionarán a través de internet.
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