Fue un trabajo que llevó mucho trabajo ya que el animal estaba asustado.
El equino había caído en un pozo, de casi 2 metros aproximadamente, el cual estaba oculto entre los altos pastizales en el lugar.
Aparentemente, el pozo era de una futura cámara séptica de una vivienda cercana.
El animal cayó, y por la altura del pozo no pudo salir, sino fue con la ardua labor de los bomberos voluntarios de Potrero de los Funes que lograron sacarlo con el uso de cintas y arneses de seguridad.
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