El Club Atlético Boca Juniors se comunicó con el Ministerio de Educación de San Luis para restablecer el vínculo con la escuela 23 “Umberto Rodríguez Saá”, cuyo edificio fue donado en 1968 por la institución deportiva, que ahora lleva adelante el programa llamado “Armando escuelas”, en honor al presidente del club que realizó la donación. “El objetivo principal es mejorar la calidad educativa a través de donaciones de materiales deportivos y escolares, indumentaria y mejoras edilicias en los distintos establecimientos”, indica la web de la fundación Boca Social.
De la escuela de Las Chacras, Juana Koslay, no existen registros de la fecha de apertura, indicó la directora del establecimiento, Paola Baigorria. “No tenemos fecha registrada en los libros de cuándo fue fundada, sí hay actas de los años 1937 y 1940, así que tenemos muchas dudas de la fecha exacta”, comentó.
La escuela está emplazada en la calle Pancha Hernández, pero antes de instalarse ahí no tenía un lugar propio, funcionaba en edificios prestados o alquilados por las familias de la localidad.
“En 1968 la directora era Amalia Teresa E. de Vargas, quien donó el terreno para la escuela, donde se asentó el edificio donado por Boca Juniors”, explicó Baigorria. El proyecto nacional estuvo bajo la supervisión del presidente del club de ese entonces, Alberto José Armando, personalidad reconocida por los hinchas. El estadio del barrio La Boca lleva su nombre.
En 1967, el club decidió donar 23 escuelas, una para cada provincia para combatir el analfabetismo. “Por lo que cuenta una de las familias de la zona, le escribieron a Boca Juniors cuando se enteraron de que donaban escuelas, y en el año 1968, donó una a San Luis. El gobierno decidió que el edificio fuese ubicado en este lugar”, contó la directora.
23 edificios donó Boca Juniors entre 1967 y 1968 bajo la presidencia de Alberto José Armando. Fue destinado uno para cada provincia. La estructura era hexagonal, simulando el estadio “xeneize”.
La escuela tenía la particularidad de que era hexagonal, simulando el estadio de Boca Juniors. Por ese motivo, los vecinos la llamaban “La Bombonerita”. Las paredes de ese establecimiento nunca sostuvieron ninguna insignia ni placa que comunicara la donación y del acto de inauguración no participó ninguna autoridad del club, solo funcionarios puntanos.
En sus inicios, antes de recibir el nuevo edificio, la escuela solo tenía 12 alumnos. Con las flamantes instalaciones, la matrícula de estudiantes fue de 50; luego, en 1995, el establecimiento quedó chico y lo remodelaron. Si bien perdió su forma de “Bombonerita”, algunos pasillos de la estructura actual siguen siendo redondos. Actualmente, 167 chicos estudian en las aulas donadas por el “Xeneize”, donde dictan tres niveles educativos: Inicial, Primario y Ciclo Básico del secundario.
En 2015, los estudiantes de la escuela 23 diseñaron el escudo que los representó a partir de 2016. La insignia tiene al Monumento del Pueblo Puntano en el centro, acompañado por líneas verdes que representan a la ciudad de Juana Koslay y azules, que hacen referencia al club que les brindó el espacio estructural inicial.
Según lo que indica la página de la fundación Boca Social, hasta febrero de este año continuaban colaborando con las escuelas donadas en Salta, La Rioja, Tucumán, Misiones, Santa Fe y Entre Ríos.
EDDLR
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